lunes, 25 de junio de 2007

Farmatodo

La vi por primera vez en un Farmatodo. Me pareció muy cómica y llamativa la forma como se inclinaba al ver los precios. Parecía una mujer interesante. Y me dejé llevar por el instinto.
Haciéndome el loco, me acerqué. Tenía que acercarme.

Traté de ver los productos de la estantería. Me fijé que estaba en el pasillo de los cosméticos y sentí pena. La miré de reojo. Y en ese instante se me prendió el bombillo.- Hola. Disculpa que te moleste, quisiera preguntarte algo, pero me da mucha pena- le dije, impactado al ver el color de sus ojos.
- No te preocupes… - me respondió, con una cara de "¿qué intenta?"
- Es que le estoy comprando maquillaje a una amiga - y al finalizar la frase me di cuenta de la estupidez que había dicho, ¿en este planeta, qué ser humano masculino le compra maquillaje a una amiga?.
- ¿Ah si? ¡Qué bien! - respondió. Y al ver mi cara se compadeció. -¿qué color de piel tiene tu amiga?- me preguntó para seguirme la corriente.
- Ehh… ella es así como morena, pero no tan morena, es oscurita, pero no tanto, es como tú.
- Bueno, yo te recomendaría que le llevaras aquél que está allá. - me dijo sonriendo y me señaló unos potecitos de nombre extraño. Qué belleza cuando sonríe, podría decir idioteces toda la noche con tal de verla sonreír.
-¿Tú crees que esa marca sea buena? - le dije yo, agarrando el primer recipiente que tuve a la mano.
- Por supuesto, es la que yo uso... mira - sacando un pequeño estuche de su bolso -creo que a tu amiga le va a gustar - y empezó a alejarse.
- ¡Qué bueno!, muchísimas gracias de verdad, por cierto me llamo Juan- seguí detrás de ella, caminando hacia la cola para pagar.
- Mucho gusto Juan, soy Alexandra- y me miró - ¿no vas a llevar más nada?-

Fue en ese momento cuando me di cuenta de mi segunda estupidez. ¿Entré a Farmatodo a comprar maquillaje? Pensaría que soy gay.
-Cierto, claro que sí- me reí para liberar la presión - También entré rapidito para comprar papitas y eso, es que mi amiga del maquillaje está cumpliendo años y nos vamos a reunir en mi casa para celebrarlo. Voy a buscar lo que necesito y vengo, me cuidas el puesto. - improvisé lo mejor que pude.
Y salí corriendo a buscar los platanitos que me habían pedido, unas papitas y unas gomitas. Volví a la caja y ahí estaba ella, sonriendo a mi regreso…

-¿No se te olvida más nada?-
-No, ya con esto tengo bastante. Pero, cuéntame, ¿a qué te dedicas?- lancé la primera pelota.
-Soy escritora, hago guiones para publicidad. ¿Y tú?-
-¿Yo?.. Bueno yo soy una parte importante del cine venezolano-
-¿Sí?, ¿eres actor?, ¿has trabajado en muchas películas?-
-Bueno, en muchas películas si he trabajado, pero no como actor, trabajo en Cines Unidos del Sambil-
- Entonces tú eres una celebridad. Deberías darme tu autógrafo.-
-Te lo doy, si me das tu número de teléfono - le repiqué, lanzándole la segunda pelota.-Bueno, pues, mira que estás muy avispado tú, ¿no?-
-Pues fíjate, si no tengo tu número no podré decirles a mis amigos conocí a la publicista más bella de Caracas.
- Es cierto–

Saque el teléfono en un instante. Pero…
-Te lo doy en otra ocasión Juan, esta vez voy apurada- me guiñó el ojo y salió de la tienda.
Me dejó ahí parado con mis papitas, mi maquillaje… y la ilusión de salir con la chica de Farmatodo.

La semana siguiente tuve la suerte de conseguírmela en el cine… y esa vez me dio algo más que su teléfono.

1 comentario:

Alceste Beüring dijo...

jajaja..esa técnica "evasiva" de comprarle maquillaje a la amiga esta muy buena... Una vez, en la agonía de la improvisación, use la palabra "modex" y "para mi hermana". La cagué por completo...
Saludos...