lunes, 15 de diciembre de 2008

Crónica de muerte lenta (Parte II)


Estaba cayendo la tarde. Poco a poco, el sol desaparecía detrás de los cocoteros. Me distraje de nuevo en otras cosas, y cuando quise buscarla, se había ido.

-¡Hey mira! ¿y ellos se fueron?- pregunté casi gritando.
- No, ya vienen-

Suspiré, pero no duró mucho. Cuando aparecieron empezaron a despedirse.

(Coño.. necesito el teléfono de esta chama. ....Mierda no tengo el celular acá, lo dejé en el bolso. Coño tengo que apurarme se están despidiendo.. verga no, qué descaro llegar con el telf en la mano... coño pero dónde lo meto, el short está mojado.. aaah qué carajo!.. coño ahí viene.. )

-Bueno chaito pues-
-Bueno dale que el niño Jesús te traiga muchas cosas bonitas y que la pases super fino-
-Igual para tí vale, un abrazo, por cierrrto.. me gustari..

(Cooooñooo.. no me jodas... )

- Bueeeno chaooo, espero que la hayan pasado super bien-
- Sii, claro que si, feliz navidad mi amor-
-Feliz navidad igual, señora, ¡que la pase sabroso!-

(ME JODÍ.... coño me jodí... se fue.. la chama se fue... cooooño!)

Desconsolado, traté de pensar lo más rápido posible. Rogué por conseguir algo que se les hubiese quedado, miré para todos lados. Mi reacción fue caminar hacia donde se había ido. Y justamente volteó hacia donde yo estaba. (vergaaa que leche). La llamé con la cabeza y se regresó hasta donde me había parado.

-Oyeeee, ¿me das tu número de telf?- pregunté
-Ok dale.. -
-Finooo, dale, chaito, pasala sabroso y trata de no estudiar tanto-
-Chaoooo-

Perfecto. Me sentía como Tom Cruise al final de Misión Imposible I, II y III. Hasta ahí estuvo todo bien.

Pero...
(... tengo unas ganas de mear arrechísimas... me toca hacerme el paisa y meterme detrás de la matica.. ).

La vida a veces abre unas puertas y cierra otras. Justo cuando estaba orinando placenteramente, pasó la camioneta donde iba ella, exactamente a un lado donde yo estaba...

El destino jugó sucio conmigo, y jamás sabré si ella estaba mirando hacia ese lado...

Crónica de muerte lenta (Parte I)


No puedo decir que fue amor a primera vista, pero si puedo decir que me llamó la atención una chica que llegó derrepente al lugar donde estaba reunido con unos amigos.

Aún recuerdo las primeras palabras que crucé con ella, cuando por casualidad sacó de su bolso un Ipod con unas cornetas y nos resolvió el dilema de la música, al menos hasta que se acabara la pila.

- ¡Qué finas esas cornetas!, ¿dónde las compraste?-
- Las compré en Margarita... o no, ya va, las compre en... sí, sí, las compre en Margarita-
- Están bien de pinga, yo quiero comprarme unas así, porque en estos días me compré un Ipod y ando fiebrúo-
- ¿Sí?, qué chévere, lo bueno de esas es que se adaptan a todos los tamaños-
- Coño qué bien, qué funcionales-

Me hice el loco y me alejé. Me distraje hasta que cruzamos un par de miradas. En eso, a mis amigos les dio por jugar tenis de playa... y yo, para no hacer el ridículo jugando, dije que iba a ser el árbitro... para hacer el ridículo a mi manera.

Después de entrar en calor con el juego, llegó el momento echarnos un chapuzón en la piscina. Todos al agua. Todos, y ella no entraba. No es que estuviese pendiente.

- Disculpa, pero la piscina para niños está allá, no querrás que te pase algo y tenga que venir alguien a ayudarte-
- Sí, eso vine a decirte, no es bueno que estés acá con los adultos. Vaya, vaya-
-Las reglas de la piscina dicen que en ésta sólo pueden entrar las personas que midan más de metro y medio.

Me hice el loco. Me le acercaba cada cierto tiempo, pasaba frente a ella silvando y viendo hacia arriba. Hasta que en un momento me djo que tenía hambre, y en eso, me explotó la cotufa que tenía en el cerebro. Me salí de la piscina.

-Ya vengo, voy a traer algo de comer, que yo tambíen tengo hambre- (claro, claro)
- Ah bueno si vá-

Cuando iba caminando de regreso con los dos platos, uno full de queso y otro lleno de doritos, me di cuenta que sería demasiado evidente. Intenté devolverme pero iba a quedar como un loco, más de lo normal. Tenía que pensar rápido.

- Aquí tienen, LES traje queso y doritos pa' que no digan que me porto mal con USTEDES- Le puse ambos platos primero a ella para que agarrara, y tuve que repetir lo mismo con todos los que estaban en la piscina.

Regresé y volví a parecer indiferente. Al rato, hubo un cruce de miradas. Esta vez estaba al lado de su intimidante papá, y giré rápido la cabeza hacia otro lado, porsia las moscas.

Poco después nos acercamos y se dió el momento para conversar a solas. Ambos nos enteramos de lo que hacíamos y porqué habíamos terminado ahí ese día. La hice reir, mientras intentaba no decir ninguna estupidez, aunque fuese por cinco minutos. Yo seguía dando palmadas anónimas bajo el agua, cuando nos llamaron que la parrilla estaba lista. Todos a comer. Esta vez no vi cuando salió, porque el hambre nublaba hasta los pensamientos más perversos, pero puse mi sillita estratégicamente cerca de donde estaba sentada, de nuevo, haciéndome el loco.

Se me hacía imposible picar la carne dura con el cuchillito y el tenedor de plástico que nos dieron así que dejé que se deslizaran por el plato hasta caerse, inocentemente, para no tener excusa de agarrar la carne con la mano. Te pareció gracioso que se me cayeran ambos cubiertos. Gracias.

Justo ahí me di cuenta que no tenía nada para tomar, y ella tenía un vaso lleno de refresco en la mano. De nuevo, cruzamos miradas, y puse una cara desoladora por no tener nada de beber. Me ofreció su vaso tiernamente, y le hice señas que al terminar me acercaría hasta donde ella estaba comiendo.

Fue cuando apareció, casualmente, su mamá, ofreciéndonos a mí y a un amigo refresco. Iba a decirle como Sanz: te lo agradezco, pero no. Me iba a inventar unas de las mías: que soy alérgico al refresco, que me cae mal, que estoy a dieta. Estuve a punto de decirle que ya su hija me estaba guardándo el mío. Pero obviamente acepté, y mi amigo, ni corto ni perezoso, también.

Comimos sabroso y de pronto empezamos todos a bailar. No es que estuviese pendiente, pero vi que se había quedado sentada viéndonos. Fuí hasta donde estaba, esta vez sin rodeos ni pelos en la lengua, para invitarla a bailar.

Bailamos sabroso tambíen. Me preguntaste si lo mojado de mi cuerpo era porque estaba en la piscina. Afortunadamente, sí. Suspiré.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Somos Hugo y yo


Hablemos claro. Puedes sentarte de ese lado de la mesa, yo me siento de este otro; pero hablemos claro.

Te considero un ser inteligente y perseverante. Lo has demostrado desde que llegaste al poder en 1999. Te considero además un oportunista, porque llegaste justo en el momento en que tu país se ofrecía más vulnerable, cabizbajo, y abriste un camino distinto en el cual creyeron muchísimos venezolanos, casi todos.

Te convertiste en una figura con mucho poder, pero no te fue suficiente y utilizaste todas las que tuviste a tu alcance, para constituir un gobierno dependiente de tí mismo. Lo suficientemente sólido para cubrirte las espaldas con varias personas que brincaron el río y se vistieron de rojo; pero también otros más sinceros y escasos, que creyeron en tu camino y aún están dispuestos a defenderlo a capa y espada.

Después de eso, empezaron a caer las promesas. No te miento, hablemos claro. Dijiste que te ibas a cambiar el nombre si quedaba algún niño en la calle, me prometiste limpiar el Guaire, me prometiste el fin de la corrupción y te aplaudí, el punto final para la pobreza extrema, que ibas a cambiar la realidad del país... y puedo seguir. Pero eso digamos no es lo más "grave", sino que NO me dijiste que ibas a cerrar un canal porque no pensaba igual que tú, NO me dijiste que ibas a manejar la asamblea y los fondos de dinero a tu gusto, NO me dijiste que ibas a cobrar y a darte el vuelto, NO me dijiste que ibas a dividir mi país y a proteger a los malandros... NO me dijiste que ibas a hacer lo que te diera la gana. Entonces, como podrás ver, las cuentas no han estado claras.

De eso te culpo: de hacer lo que te dé la gana y de permitir que tu gobierno sea de comiquita, de balurdos, de títeres. No me digas que no, porque tú mismo los hiciste. Son creados por tí y tienen tu conciencia. Ninguno en su sana naturaleza se atrevería a contradecirte.

Te culpo de engañar a muchos venezolanos, quienes se rinden ante tus palabras porque han creído, creen y creerán en tí por mucho tiempo, y tú ahí tranquilo sin cumplirles, preocupándote sólo por quedarte indefinidamente a la cabeza de este país. Y es aquí donde entra el asunto que me desvela, y me permito iniciarlo preguntándote: reelegirte indefinidamente ¿PARA QUÉ?.

¿Para que continúe la desidia de tu gobierno por muchísimo más tiempo?, ¿para cortar eternamente las vías de desarrollo más básicas que tiene una sociedad?, ¿para que te inmacules ante el mismo pueblo que pisoteas?... Me dirás tú que no, que estoy equivocado, que quieres cambiar la constitución para que Venezuela prosiga en su camino revolucionario y de ahí pasarás a decirme que tú, humildemente, te propones como el ser más capaz para llevar las riendas de Venezuela en ese lindo, mejor dicho, bellísimo trecho que hay desde donde aún estamos (a pesar de tus bien ganados 10 años) hasta donde nos esperan unas dulces doncellas socialistas con uvas en la mano y abanicos para echarnos aire.. y aquél petróleo por los aires.

Entonces, propongo no preguntártelo a tí, porque sé DE MEMORIA tu respuesta. Propongo preguntárselo a la señora ama de casa que consigue todo muchísimo más caro para hacer las hallacas, al mecánico que no puede continuar con su taller porque el control cambiario lo deja frito, al señor del kioskito que lo han robado como 4 veces en el año, a la secretaria que tiene que echarle un camión de bolas para llegar sana y salva a Guatire, a los que hacen justicia en este país y no han muerto en el intento, a los de aquél pueblito que sufren día a día las inclemencias del clima y no tienen a nadie quien vele por ellos, a las madres de los chamos que han muerto mientras daban sus primeros pasos en la delincuencia, a los que trabajan en tu gobierno y se quedan callados para no perder su trabajo, en fin... a todos preguntarles ¿PARA QUÉ ACEPTARTE INDEFINIDAMENTE?

Y estoy seguro, no es pesimismo, que habrán muchísimas personas que aplaudirán tus intenciones. Porque también es parte del venezolano hacer lo que le de la gana, porque aún existe muchísima gente que celebra EL PAN DE PIQUITO, porque aún somos inmaduros y preferimos unos riales en vez de seguridad social, porque hay gente que saltaría de felicidad con tu mandato eterno para poder seguir siendo HONGOS DE LA SOCIEDAD. Y a ellos, mis más sinceras palabras de condolencia.

Por eso queda de tu parte decirme cuándo y dónde. Y estoy seguro que nuevamente los venezolanos nos levantaremos tempranito y estaremos en las colas echando vaina y jodiendo, para llegar a las urnas y expresar nuestra voluntad. De hecho, ya hasta le agarré el gustico a las elecciones. También queda de tu parte empezar a comprar conciencias, a volverte loco. Por supuesto, quedará de mi parte ir a la máquina y pulsar NO... una, dos, tres, cuatro veces.. LAS QUE QUIERAS, hasta que se dañe la máquina.

Y ese día los venezolanos respiraremos profundo. Tomaremos una bocanada de aire para hablar lo más fuerte posible.

Ese día... hablaremos MUY claro.


Addenda: ¡Qué fácil se me hizo hablar con Hugo vale!, de verdad. Espero que les haya gustado. También espero que de alguna manera traten de llevar este mensaje a todos. Nos merecemos algo mejor y aprobar la emienda sabemos que no es el camino. Además, espero que éste no sea el último post del año. Mil gracias a todos.

viernes, 17 de octubre de 2008

Dieciocho Historias

He vivido dieciocho historias en mi vida.

El sol cada día penetra distinto por mi ventana.

Me he convertido en una galleta de soda.

Cada letra que escribo me recuerda que estoy un paso detrás. Siempre uno.

Soy materia gris. Soy un objeto locuaz que no tiene ni pies ni cabeza.

Mi album de fotos se parece a una cámara indiscreta.

He recorrido muchas millas pensando tu nombre.

Fue sublime sólo el instante en que pude perderme en el bosque de tus rulos.

He reido hasta llorar, pero siempre se me hace difícil llorar hasta reír.

No he muerto, pero he visto a otros morir. Sé de memoria cómo se marchita una flor.

He escrito 45 textos.

He soltado millones de carcajadas y no me arrepiento de ninguna.

Mi infancia no la cambio por nada; mis padres, menos.

He estado en 5 países y sólo Caracas es mi hogar, mi ciudad.

He vivido lo que es comerse un cable; he comido lomito y salmón.

Escuché mil canciones. He cantado hasta quedarme afónico.

He sido actor, escritor, contador de chistes malos, amigo, hijo, hermano, novio, empleado, guía, estudiante.

He vivido... he vivido dieciocho historias en mi vida.


Addenda: ¿Es un pájaro?¿es un avión?... ¡No!, es Superman.. Así es este texto: no es un poema, no es un cuento y no es un ensayo. Entonces, ¿que es?.... pues, es... Superman.

Este texto es especial, por varias cosas. Primero, es uno que habla mucho de mi, de mi vida y mis años. Segundo, hace que salga de una sequía en el blog que me traía cabezón y Tercero: sirve para celebrar, además de mi próximo cumpleaños, el haber cumplido más de tres mil visitas en el blog. Otra cosa: pueden fijarse que en total son 18 líneas. ¿Dieciocho historias nada más?.. Para nada, son muchas.. y hay que contarlas todas. Mil gracias.

lunes, 29 de septiembre de 2008

Aquella gran Tertulia


Hace poco conversaba con mi amigo Francisco acerca de Gracias al Ocio. Él, me comentaba que le parecía interesante el mundo de escribir en un blog. Yo le dije que era una buena experiencia y lo invité a que un día lo intentara. Después de unos instantes de silencio, me hizo una pregunta que jamás olvidaré. "¿Te han entrevistado algún día?". A mi me dio risa. Pero al cabo de un segundo me puse serio. Le respondí que nunca nadie lo había hecho. Fue el momento cuando me dijo una segunda cosa que tampoco olvidaré: "Entonces, si quieres, yo te entrevisto, pero serio, fuera de joda". Acá les coloco el resultado de aquella tertulia.

F: ¿Qué significa tener un blog hoy en día?.
H: Tener un blog es como tener un terreno virtual. Es un pedacito dentro de ese gigantesco mundo llamado Internet. Un terreno cercado donde puedes colocar cualquier cosa dentro e invitar a tus amigos a que entren y las vean. Es un espacio que te brinda libertad de expresión a todo dar y eso hoy en día es demasiado importante.

F:¿Qué es lo más difícil de tener un blog?.
H: Abrir un blog es demasiado fácil. De hecho, no te tomaría ni 5 minutos ser el dueño de uno. Todo el mundo puede hacerlo y el único requisito que yo veo, es que debes saber manejar el mouse. Ahora, lo más difícil de tenerlo, es mantenerte vivo a través del tiempo. Para ser siempre interesante debes tener siempre información actualizada, que atraiga a la gente. Sé que parece tonto, que la gente hace click ahí y ya. Pero ganarse ese click es medio peluo, y aún más pelúo es que vuelvan a hacer click. ¿Me entiendes? El hecho de mantenerse con lectores a través del tiempo es lo que más me ha costado. Por eso aprecio tanto cuando alguien me dice que le mostró el blog a un amigo.

F: Me imagino que abriste el blog para distraerte o divertirte. Además de eso ¿qué es lo más gratificante de tener una bitácora como ésta?.
H: Sí, abrí el blog para divertirme, pero sobretodo porque me gusta distraer a otros. Es algo que disfruto. De allí viene lo más gratificante de este asunto, el saber que lo que yo aquí publico entretiene a la gente. No tienes ni idea lo bien que se siente cuando alguien me dice que le ha gustado un texto. No sólo eso, también cuando me critican, es super gratificante. Es crecer día tras día. Es motivarte a seguir escribiendo y hacerlo mejor cada vez. Definitivamente estoy orgulloso de lo que he logrado, el primer fan de mi blog soy yo mismo.

F: ¿Dónde aprendiste a escribir?.
H: Con esa pregunta acabas de matar un post del blog, porque tenía pensado escribir sobre cómo aprendí. La historia comenzó en bachillerato, con un profesor de Castellano fuera de serie. Su nombre es César Velásquez. Desde el día de mi graduación no he sabido más nada de él, pero dejó en mi muchas cosas buenas, entre ellas, la pasión por la buena literatura. Las clases con él eran totalmente distintas a las clases que te puedes imaginar de Castellano. Un día llegaba al salón siendo un personaje... y se paraba en el medio a decir un monólogo, tal vez improvisado. Le encantaba el teatro, bueno, en general, amante de las artes y de las letras. Al mismo tiempo que nos daba clases, también se dedicaba a dirigir su propio cortometraje llamado "Alas de Plomo", del cual no supe más nunca. Sé que lo llegó a grabar, y sé que adquirió fama local dentro del medio. De aquellas clases vienen mis aires de escritor, cuando nos daba unas pocas frases y nos pedía que hiciéramos una historia a partir de allí o un ensayo. Recuerdo que hice como mil ensayos. Estuve todo bachillerato escribiendo, y al graduarme sentí que no podía dejar de hacerlo. Nos enseñó a ser críticos con fundamento. A ver la vida como una historia muy larga, de amor, de terror, de lo que fuese.

F: ¿Qué le dirías si lo tuvieses enfrente?.
H: Le diría: "Gracias al ocio y a lo pelúo que fuiste: mira lo que hago ahora!" Bueno, en realidad, creo que me daría pena mostrarle el blog. Pero sería la cosa más interesante del mundo... ver cuánta nota me pone.

F: ¿De dónde sacas las ideas para los textos?.
H: Mucha gente me pregunta lo mismo. Es una gran mezcla. Son mentiras con verdades... experiencias mías con experiencias de otros. Constantemente estoy pensando en qué escribir, en situaciones cotidianas, en personajes llamativos, cosas así. Hay textos que salen muy rápido y hay otros en los que estoy semanas enteras sin saber cómo terminarlos; o capaz tengo el final y no sé cómo comenzarlo. La creatividad no es todo el tiempo la misma. Sin embargo, la totalidad del blog es creación mía. Aunque confieso que en un famoso blog español existe un texto parecido a "De predicciones". Del resto, son cosas que se me van ocurriendo. Hay momentos en que debo reprimirme los ataques de escribir cosas personales que me pasan. Siempre me reprimo porque odio los textos tipo "Querido Diario... hoy fulanito me dijo que era feo y todos se rieron". Detesto leer algo que me cuente lo que hice esta tarde, o cómo resultó aquel almuerzo... o si la chica me paró bolas. Son dos cosas distintas: contar una experiencia y usar un blog como si fuese un mal amigo. Y cuando lo haga, sabrán que metí la pata.

F: ¿Cómo ves a Gracias al Ocio en el futuro?.
H: Me gustaría verlo con más lectores. Con cosas nuevas, con nuevo diseño. Con publicidad. Me encantaría verlo con textos que den risa y sobretodo con muchos comentarios. Lo veo más viejo, más grandecito y maduro. Pero lo veo bien.

F: ¿Y al autor?.
H: Buena pregunta. Al autor lo veo barbudo, gordo, dormido en una silla con una botella de ron. (risas). En verdad, me veo dedicado en mis otras cosas, sin dejar de lado mi más grande tarjeta de presentación, que es Gracias al Ocio. Comprometido con este saperoco.

F: ¿Qué otra cosa te gustaría hacer al estilo de Gracias al Ocio?.
H: Hay una cosa que me quita el sueño por las noches. Me llama demasiado la atención hacer un cortometraje. Filmar algo con sentido que quede súper bien, no algo mamarracho. Pero he sido un cobarde y no me he atrevido a nadar en aguas que no conozco. Cobarde, no tengo otra palabra. A veces sueño con estar filmando una escena, o con ver algo en la pantalla que yo he creado, eso me pone los pelos de punta. Entonces me pongo melancólico y hace que me pregunte muchísimas cosas. También estoy loco por aprender a escribir guiones cinematográficos o cosas por el estilo. Y por supuesto, aprender a escribir de manera más seria, con nuevas técnicas. Estoy seguro que un día, mientras esté echado en el sofá pensando, me voy a decidir hacerlo.

F: Ha sido una muy buena conversación, para cerrar ¿alguna otra cosa que quieras decir?.
H: Sí claro. Gracias, siempre gracias. A todos... y al Ocio.

miércoles, 24 de septiembre de 2008

El amante (Segunda Parte)

Sonaban las gotas de agua al estrellarse con la cerámica barata que alcanzaron a comprar. Marcos se enjabonaba el pecho, o al menos, lo intentaba. Estaba distraído pensando en la vida que llevaba desde hace dos años. Había sido infiel tantas veces como gotas caían de la regadera. Prácticamente se había convertido en un amante de profesión, y su trabajo "verdadero", la coartada, había llegado a ser sólo la excusa perfecta para no estar en casa a tiempo.

Aquella misma casa que a veces usaba menos que la habitación de cualquier hotel; quizás para darse una ducha y buscar una muda de ropa limpia.

Absorto en su propio mundo, Marcos volvió en sí cuando oyó el estruendo que hizo Marta al abrir de par en par la puerta del baño.

-¿Qué pasó vale?, ¿porqué entras así?-

-Bueno este también es mi baño ¿no?-

-Bueno, muñequita, por si todavía no te has dado cuenta, lo estoy usando.-

-Solamente vine a saludarte coño, para que sepas que estoy en la casa, al menos, y sabes bien que detesto que me digas así.-

-Perdón, su alteza. Míra vale hazme un plis. Pásame el champú que está ahí en el estante.

-¿Y qué pasó con el que está allá?-

-Me lo gasté todo, mamita, cuidando este pelito de ensueño.-

-Verga, cuidado con una modestia. Aquí está, agarra rápido que no me quiero mojar.- Por un momento sólo se oyeron las gotas caer.

-Oye gordita ¿estás ahí todavía?-

-Sí coño... me llamó la atención una mancha que tienes en la ropa, parece como brillo, y del barato... ¿Tú como que andas puteando Marcos o qué?-

-... es que estos carajos si joden. Coño Martica, mi cielito, esos fueron los tipos del trabajo vale, que andan con un chalequeo todo el tiempo. No le pares que fueron ellos para echarme vaina.-

-Ahhh ya... claro vale y yo tengo cara de pendeja. Cuidado con una vaina Marcos Guillermo.-

Marta, sumisa, salió del baño dando un portazo, casi tan rápido como cuando entró. La casa volvío a quedar sumergida en el silencio.

Al cabo de un rato, Marcos estaba ya fuera del baño y como si estuviese estrictamente planificado, sonó su celular: 1 Mensaje de texto nuevo. Hay mucho trabajo pendiente, necesito urgente que traigas esos papeles, la oficina está sola, parece que hoy no vamos a poder salir temprano.

Apareció la señal y Marcos tuvo que apurarse. No le dió la más mínima importancia a la discución con Marta, quien tampoco se preocupó mucho al verlo salir. Quizás era la oportunidad que ella necesitaba para enviarle la señal a su amante, quizás no.

Tal vez, con las colas de Caracas, Marcos tardaría más de media hora en llegar. Suficiente tiempo para que Lorena, su jefa (la queridita) preparara la oficina para una ardua noche de trabajo (sumas, restas e inclusive.. multiplicaciones) y pusiera todo en orden: la botellita de vino tinto chileno, el que causa sensaciones en la boca, el escritorio con vista directa a la noche caraqueña... y sólo faltaba que el empleado del mes llegara... a poner los papeles en su lugar.


Addenda: ¿No entendiste un zipote de la historia y la cabeza te mata por saber dónde está la Primera Parte? En la sección "Los archivados", ve directamente a Enero de 2008. Justamente ahí está el comienzo. Como anécdota puedo contarles que pasaron 9 meses entre los dos textos, y además que el primero está escrito en 1era persona y éste último está en 3ra, cosa que no me había fijado hasta ahorita. Mil gracias, como siempre.

sábado, 20 de septiembre de 2008

Derecho a Morir


Una mañana me despertó el sonido atorrante del timbre de mi casa. Abrí los ojos, poco a poco, para que la luz que entra por la ventana no me dejase ciego. Tantié con los pies el piso frío en busca de mis alpargatas, justo cuando sonaba el timbre por segunda vez. Imaginé que debía ser la conserje del edificio anunciando que iba a quitar el agua.

-Yaaaa voooooy-

Vestido con la pijama y luciendo una fabulosa cara con peinado mañanero, abrí la puerta. Apareció parado frente a mi un hombre con chaquetica barata con el logo de una empresa, camisa blanca percudida, pantalón caqui, zapatos sucios y un maletín desgastado. Debajo de esa vestimenta se esconde una persona normal, pero había sido el afortunado ganador de una loca lotería. Esa mañana había cometido un error, abrir la puerta y separado por sólo un escaso metro, tenía un terrible e implacable vendedor.

- Muy buenos días señor - destacó con una enorme sonrisa.

- ¿Qué tal?, ¿en qué le puedo ayudar?-

- Ayúdeme más bien a ayudarlo a usted, mi estimado amigo.-

- Mmmm... De acuerdo.-

- Usted parece ser una persóna dinámica, actual, consiente de todas las tendencias, ¿cierto?.- Una de las características de los vendedores es que hace 2 minutos que hablas con ellos, ellos ya te conocen de toda la vida, inclusive sin saber tu nombre.-

-La verdad es que sí. Tengo la tendencia a quedarme dormido con los que tocan mi puerta un sábado.-

- No se preocupe, que hoy estoy aquí para cambiarle un aspecto de su vida.-

- ¿Va a darme plata?-

-Inclusive algo mejor. En esta época que estamos viviendo, ¿no siente usted que nuestros derechos están siendo reducidos e inclusive nuestras libertades, tan simples como nacer o morir a placer, se ven disminuídos con las políticas de algunas personas?.-

-Tiene razón, a veces tengo la impresión que no me dejan seguir durmiendo.-

-Ya veo que me está entendiendo, usted es una persona razonable, entonces, ¿no le gustaría tener esa oportunidad de morir cuando le plazca?, ¿sin tener que cumplir toda una parafernalia?. Sólo imagíneselo, parece imposible; pero con lo que yo le traigo esta mañana, puede ser todo suyo.-

- Me está diciendo que usted me va a vender ¿qué?-

-¡Pues su Derecho a Morir!. Simple, donde usted quiera, cuando usted quiera, como usted lo pida, tenemos planes pensados para su satisfacción.-

-¿Y cómo podría estar satisfecho, si ya estoy muerto?-

- Precisamente, al morir, ¡usted estará satisfecho!, se lo garantizamos. Usted sólo debe firmar un contrato en el que nosotros le entregamos totalmente el servicio de "Una" muerte.

- ¿Y qué tengo que dar a cambio?-

- Una módica contribución monetaria, que si bien lo piensa, no significa nada ante lo que está recibiendo: El completo derecho a morir plácidamente.-

- ¿Usted ya tiene ese derecho?-

- Claro, no dudé ni un segundo en comprarlo, para estar más tranquilo.-

-Yo creo que usted tiene muchas ganas de usarlo hoy. ¿Qué le parece aquí parado frente a mi?-

-La verdad, no mucho.

-Entonces... le sugiero que se aleje de mi puerta... y que vaya a venderle el derecho a morir... a la madre que lo parió!!!!.

Addenda: Honestamente, la foto no tiene nada que ver con lo que trata el texto; pero por más que busqué una imagen, no conseguí nada. Como cualquier blog grande que se respete, también tengo un caricaturista, pero está de vacaciones. Como siempre, gracias a las personas que se han sumado como lectores del blog por sus comentarios tan positvos y a los viejos que me han dado apoyo para seguir con estos textos locos.

martes, 16 de septiembre de 2008

Le Pettit Publicité


Estoy seguro que el mundo sería un lugar distinto si no fuese por nuestros amigos los publicistas y sus marcas. Son simples genios, artistas creativos que se matan horas y horas por descubrir la mejor manera de hacernos comprar tal producto, o comer en aquel lugar o hacer cualquier cosa que ellos quieran. Puedo decir con sinceridad que nuestro futuro está en manos de esas mentes.

¿No se han puesto a pensar qué sería de nuestro querido planeta si los publicistas hubiesen empezado todo de otra manera? ¿Qué tan distintas serían nuestras vidas si las marcas de hoy no fuesen los productos que son? Sería un caos, eso es seguro. Para muestra un botón:

Sienta la nueva experiencia en sabor. Cómalas aquí, cómalas allá, cómalas donde quiera, pero cómaselas ya. Nuevas galletas Chevrolet, divinas, como a usted le gustan. Pídalas en su kiosko, pida: Galletas Chevrolet y sienta la experiencia del confort en su boca.

¿Siente que su esposo lo tiene duro? Pues enjuague el cuello de sus camisas con el nuevo suavizante Sony Erricson, que deja una textura sedosa, que a su marido le encantará y sabrá retribuirle. Sony Erricson, ¡lo mejor en suavizantes!.

¿Cansado de contar ovejitas al acostarse?, lo que usted necesita es un Colchón Firestone, unicos con sistema Nock Out que lo dejará durmiendo en menos de lo que pueda parpadear. Se lo recomiendo, Colchones Firestone, porque un sueño sin control, no sirve de nada.

Los accidenes ocurren y en Seguros Solera Light estamos concientes de ello. Por ello le proponemos la mejor cobertura en caso de accidentes de tránsito. Seguros Solera Light es el único con servicio Primium: porque no es lo mismo tener un seguro y no necesitarlo, que necesitarlo y no tenerlo.

¿Mala recepción? Evite esos problemas del pasado con su nuevo teléfono Mcdonal's 2376 únicos con cámara de inimaginables megapixceles. A la hora de elegir, recuerde que con su teléfono Mcdonal's, ¡las sonrisas son gratis!

Addenda: Sección de textos cortos con ideas locas, en los próximos días estaré publicando otro. No se olviden, porfavor, de colocar su calificación del blog completo en la nueva encuesta que está en la parte derecha. Mil gracias como siempre.

viernes, 22 de agosto de 2008

Anti-horóscopo


El horóscopo nunca va a cambiar. De eso debemos estar claros. El horóscopo será siempre la ciencia de decirle a la gente en el oído las cosas que quiere oir. Ha sido siempre un negocio, y dudo mucho que deje de serlo.

Me hace ver una vida que no tengo. Provoca miedo en las personas, falsas expectativas y deseos incumplidos, tanto así que creo más en un heladero que en un horóscopo.

Cansado de estas cosas, decidí tomar un breve curso de astrología por Internet, donde aprendí lo necesario para detener a los mercenarios escritores que publican diariamente textos demasiado generalizados e insuficientes y, además, para satisfacer las necesidades de un público atento a lo que depara el futuro. Luego de aplicar las técnicas más básicas, surgió la esencia simple de cada signo zodiacal. Así que, lo que coloco a continuación, es el fruto de mi tan esmerado esfuerzo.

Aries: Quédate tranquilo(a) Aries, Saturno viene por tí pronto. Un hombre desnudo se te acercará y te pedirá dinero a cambio de sexo, procura responder con la sinceridad por delante, o por detrás, como tu quieras. Tendrás una mañana que querrás quedarte dormido y no ir al trabajo. Cuídate de las caminatas nocturas, te llevarás una silla por delante mientras vas a la nevera. Mi consejo: Cepíllate siempre los dientes antes de dormir, acuérdate que los dientes de arriba se cepillan hacia abajo.

Tauro: Tendrás problemas con un mototaxista. Olvídate de ir a algún parque esta semana porque Neptuno está en posición con Marte y lo más seguro es que te caiga mierda de pájaro en la ropa. Ve pidiendo de una vez la cita con el médico: tendrás problemas intestinales por una parrilla que te comerás. En el amor: dale sin miedo, experimenta cosas nuevas. En el trabajo: tus compañeros sentirán un deseo de abrazarte mientras almuerzas. Mi consejo: Cuida tu higiene personal, evita tirarte peos mientras duermes.

Géminis: Buenas vibras para tí. Te conseguirás un dinero perdido en el piso. Aléjate de algo relacionado con un motel y alguién que simula ser mujer. Evita sorpresas indeseadas. Te llamarán a media noche preguntándote si estás de turno a esa hora. En el amor: experimenta posiciones nuevas. En la salud: posiciones sexuales te traen problemas de espalda. En el trabajo: llega temprano, el jefe te tiene pillado. Mi consejo: trata siempre de tener tu teléfono celular con pila.

Cáncer: Cuídate de tu familia, tus hijos te agarran plata mientras te bañas. Del resto, te veo bien. Evita comprar cosas que no necesites y no vayas a usar, como por ejemplo máscaras antigas, percheros y esas cosas. En el amor: cambia la marca de condones que usas. En el trabajo: intenta ver menos televisión mientras trabajas. Mi consejo: Tu dinero siempre estará más seguro en el banco que debajo del colchón.

Leo: Demuestra tu cariño más a menudo, las personas que te rodean piensan que eres antipático. Fluctuaciones en la órbita de Plutón te originan graves problemas de disfunción eréctil. Tendrás una leve sensación de derrota que deberás sobrellevar. En el amor: ya te dije, estás salao. En el trabajo: no vas a tener ni ganas de trabajar. Mi consejo: que Plutón se apure.

Virgo: Mi muy querido y espiritual virgo(a), a tí te sale buena suerte esta semana. Así que procura jugar cuanta lotería exista, triples, terminales, kino, triple gordo y demás cuestiones del azar. Virgo(a) también te veo generoso con las personas que más aprecias, en especial, los que te han dicho cosas del futuro. En el amor: ámate. En el trabajo: tómate tu tiempo para ir a jugar lotería. Mi consejo: Nunca olvides la generosidad.

Libra: Esta semana estarás muy emotivo. Procura siempre estar con una sonrisa y cuando tengas ganas de llorar por cualquier cosa, corre y escóndete. En el amor: Sentirás que tu pareja te trata mal. En el trabajo: sentirás que tus compañeros te odian. Mi consejo: Corre.

Escorpio: Éste es el signo más bello del zodíaco. Te costará mucho terminar un trabajo. Recibirás una buena noticia. Alimenta tu ego, aprovecha y come elogios. Necesitarás ayuda de una conserje para salir de un ascensor. Deberás evitar, por un tiempo, los sitios donde hay muchas mujeres pendientes de tí. En el amor: sin comentarios. En el trabajo: conocerás muchos colegas y premiarán tu trabajo. Mi consejo: Reduce la velocidad en las curvas.

Sagitario: Caminarás cientos de metros detrás de una prenda de ropa escencial que se te voló gracias a la brisa. Pasarás una pena en público. Se te caerá el cepillo de dientes en la poceta. En la calle te confundirán con un mendigo y te darán limosna, pero no te preocupues, aún puedes caer más bajo. En el amor: lo del mendigo alejará a tu cita. En el trabajo: vístete mejor. Mi consejo: en Monte Cristo hay ofertas.

Capricornio: Definitivamente capricornio este es tu momento. El aura de Neptuno te puso a valer, así que tendrás buen apoyo en los negocios. En el amor: no te veo tan bien, las variaciones del polvo cósmico de Júpiter provocan desequilibrios en tí. En el trabajo: se dañará el microondas y todos te echarán la culpa. Mi consejo: llama a un buen técnico.

Acuario: ¡Tú futuro es una maravilla!. Heredarás una plata. En el amor: empezarás milagrosamente a tener suerte. En el trabajo: ya no necesitas ir. Mi consejo: siempre he creído que la BMW es mejor que la Porshe.

Pisis: ¡Ay mi pisiano(a) del alma!. Te sentarás encima de algo mojado en el cine. Te montarás en una camionetica que será abordada por unos maleantes, pero después te reirás del asunto. En el amor: tendrás problemas de estabilidad con tu pareja. No intentes alzarla por un tiempo. En el trabajo: tu jefe tendrá dudas de tu sexualidad. Mi consejo: Más vale pájaro de jefe en mano... que cien volando.

miércoles, 30 de julio de 2008

Antología de una zoociedad


Existe una cosa de mi Caracas que me llama mucho la atención. En todo lo largo y ancho del valle donde está mi ciudad, se crea el ambiente perfecto para que, en el mísmo código postal y zona horaria, puedan convivir dos fenómenos impresionantes de la zoociedad (sociedad) actual.

Son como el agua y el aceite, el ying y el yang, chávez y bush, batman y el guazón... Son como la materia y la antimateria: si entra en contacto un miembro de cada grupo con el otro, se produce un desequilibrio aural en el universo completo. Además, se rompen las cadenas que controlan el buen vivir de la zoociedad entera. Se produce lo que llaman los expertos como "el encuentro" (del latín: encuentrus que significa encuentro), trayéndo como consecuencia catastrófica el desenlace de la raza humana, por los siglos de los siglos.

Para que entiendan la gravedad del asunto, a continuación prosigo con un informe detallado de las características principales de los personajes antagonistas de nuestra zoociedad.

Grupo I
- Visten pantalones de tubito.
- El macho, posee las bolas necesarias para pintarse el bigote con agua oxigenada.
- Se desplazan en motos y/o metro mayormente.
- La hembra es denominada por el macho como "la que talfi" (del francés: "la quetalfier").

¿Aún no saben de qué zoo-tipo les hablo? Aquí va una más:
- Acuden frecuentemente a matinés en Chacaito, donde hacen una especie de ritual étnico con un ruido que dieron a conocer como "Changa ...... " de "La Máquina Latina".

Pues sí, ¡les hablo de los tukkis! Ese grupo que atrae más y más seguidores por tanto estilo que brota de sus cuerpos, vestidos con lo último que trae la Nike al mercado del Cementerio, pantalones que cortan la circulación del pie, zarcillos de fantasía, y el clásico bolsito pegadísimo espalda, todo un monumento a la distancia y categoría, luciendo una cabellera peinada con un "Sayayin" usualmente acompañado por mechas amarillas.

Ruego por mis disculpas a todos los lectores tukkis o dolientes, pero tenemos que ser honestos. Les pido, a los demás lectores ajenos al clan, que sean convalecientes con estos muchachos (as) tukkis, ya que podrían ser comparados inclusive con los monjes, por la labor heróica de andar vestidos por el siglo XXI de una manera tan subrealista. Seamos honestos, señores, la ropa tukki es la vestimenta del mañana.

Según los Tukkólogos (personas estudiosas de la tukkilogía), existe la creencia de que si matas a un tukki, éste se divide en dos, y ahora tienes dos tukkis. Lo que previene cualquier intento de extinguirlos. Pertenecer a este bando requiere dominar a la perfección el lenguaje de los malandros. Cuando un tukki quiere decir "mi novia tiene puesto unos zapatos muy bonitos" sería traducido literalmente como: "mi jevita lo que polta es unos pisos de lo más calteluos a tres tablas won". Esto, sin agregarle los accesorios clásicos: la perinola y el celular con changa a todo volúmen.

Vemos pues, el recorrido que hemos hecho por las más impresionantes cuestiones de nuestra propia zoología, vista desde uno de sus bandos. Ahora vamos al personaje antagónico.

Grupo II.
- No pisan el metro, ni porque ocurra un ataque nuclear, y cuando lo hacen, se lo cuentan a todo el mundo.
- "Somos tu y yo", causó revuelo en sus mentes, lo que trajo como consecuencia el sobre uso de una palabra: osea, que se usa para sustitur cualquier otra palabra. Osea, como un impostor del castellano.
- Ir al centro de Caracas, es como ir a la luna.
- El macho debe necesariamente tener un carrito "de pinga".
- La hembra debe necesariamente haberse puesto lolas o estar entrando al quirófano para ponérselas.

¿Nada todavía? Sigamos:
- Su ambiente natural es el Centro San Ignacio o el Centro Paseo El Hatillo.
-Si no tienes Facebook, es como si no hubieras nacido. Podrás tener cédula, pero el Facebook es más importante.

Pues sí, nuestro segundo grupo son Los Sifris, seres super nice que glorifican al Ipod Todopoderoso. Son extranjeros viviendo en Venezuela, pobrecitos, incomprendidos por todos los sacrificios que aquí hacen. ¿Cómo vivir sin un SevenEleven?. Aman cualquier cosa que tenga las letricas U.S.A precedidas del "made in".

El sifri macho común sube cerro es cu
ando tiene que hacer ejercicio. Su oído es alérgico a la música criolla venezolana y cuando la oye se desorienta porque cree que está de viaje y comienza a darle golpecitos al Ipod porque cree que se quedó sin pila. Aman con locura lo nuevo. Saben al pelo en qué municipio queda Disney, pero no tienen ni idea de cómo llegar a Barinas. Su vestimenta varía según los gustos, pero el sifri sigue el lema de que marca es marca.. lo demás es monte y culebra.

Los Sifrinólogos (aquellos seres que dedican su vida a estudiar la Sifrinología) destacan que la característica más relevante es que son pantalleros. Les encanta ser sufridos. Si matas a un sifri, cometiste un error ¿ok? porque seguramente llegarán los de CSI a tu puerta y te arrestarán. Además, los sifris de ahora gozan desde chiquitos sifrinmunología, que los proteje de cualquier contacto que tengan con una persona niche.

El sifri tiene tendencia a consumir cualquier cosa que diga "light". De hecho, si le colocas al frente una piedra que diga light, lo más probable es que te la compre y se la coma. Así mismo, gozan de un lenguaje propio en códigos peligrosísimos. Si usted quiere decir "No estoy de acuerdo contigo" deberá gesticular: "helloooo... osea niño búscate una vida en google".

Es por esto y otras cosas más, que parar a un tukki frente a un sifri provoca la hecatombe de nuestra zoociedad. Lo mejor de todo sería meterlos en un cuarto y ver qué sucede. Se quedarían viendo, burlándose uno del otro, sin hablarse porque ambos saben que no se entenderían. Hasta aquí entonces, esta humilde antología de los personajes más interesantes de nuestra zoociedad. Sea tukki, sea sifri... sea lo que usted quiera ser, aquí en Gracias al Ocio, nos burlaremos de usted.

martes, 15 de julio de 2008

Juegos de Seducción



Voy a ser tu mayordomo...
Y vos harás el rol de señora bien,
O puedo ser tu violador...
La imaginación,
Esta noche todo lo puede..


Aquella tarde pequeñas gotas de una suave llovizna mojaban las calles de Caracas y como guinda en un postre, la luz eléctrica brillaba por su ausencia, convirtiendo la capital en la sucursal del infierno. Aproveché los minutos de paz que me brindó la oscuridad para prender un cigarrillo y pensar en mi relación con Cristina. Realmente estaba por el suelo nuestro noviazgo. Desde un tiempo para acá sólo nos veíamos cuando coincidíamos en el baño de nuestro apartamentico alquilado, si acaso, y las oportunidades de rescatarlo se vinieron a pique cuando me vi durmiendo en el sofá, al lado del gato.
Miraba por la ventana, mientras me llamó la atención un motorizado que hacía lo imposible por pasar entre dos camiones. Era delivery de pizza, con la caja atrás en la moto, vestido de uniforme ridículo con gorra. De ahí, de esa pinta, salió mi primera idea para reconquistar a Cristina.

Llegué a la puerta de nuestro apartamento. Vestido de pies a cabeza como un repartidor, agarrando con una mano una tela de cuero que cubría una caja de pizza llena de pétalos de rosas y juguetes eróticos. Toqué el timbre, esperé a que me examinaran por el ojo mágico, y apareció detrás de la puerta la señora de la casa.

- Buenas tardes, vengo a entregar mi pedido- dije con la voz más sexy que me pudo salir.-
-Buenas tardes señor, pero yo no pedí pizza, debe ser un error-
- La pizza esta a nombre de la señorita Cristina, y la descripción dice una despampanante rubia, con un cuerpazo igual al de usted. ¿Se encontrará ella por aquí?-
- Pase adelante, ya le pago.-
- Si me puede regalar un vasito de agua, está haciendo mucho calor. - Empecé a quitarme la ropa.
- Agua por los momentos no tengo, pero si le puedo quitar la sed con otra cosa.-
- Bueno señora, a ver, ¿qué tiene por ahí que pueda satisfacerme?-
- A ver, bueno tengo juguito…-
- No hablaba de tomar, precisamente, señorita. - Abrí la caja de la pizza y Cristina hizo un esfuerzo por aguantar la risa.
- ¿Cómo le dicen a esa?-
- A esa… a esa le decimos… "Just Love"- me acerqué, la tomé entre mis brazos y recorrí cada centímetro de su cuello con mis labios.
- Eres el repartidor más atrevido que he visto en mi vida- me dijo
- Y eso que… aún no entrego mi pedido- le respondí.

Esa tarde, había creado el más increíble juego de seducción. Hubo muchas tardes como esa, hubo también muchos personajes, desde policía pasando por bombero, hasta de plomero grosero…
Sólo el tiempo me hizo experto en el placer amarte de maneras distintas. El paso de los días me había convertido en el ganador de nuestro juego. Nuestro juego de seducción.

Estamos solos en la selva,
Nadie puede venir a rescatarnos,
Estoy muriéndome de sed,
Y es tu propia piel...
La que me hace sentir este infierno.

Addenda: No había tenido la oportunidad de agradecerles a todos los que me leen por el cariño que recibí en los días después del cumpleaños del blog. Gracias de verdad.
Por cierto, los últimos textos han estado medio fumados ¿no creen?. Con eso cumplí lo del monólogo, que después de una historia triste viene una de amor. Sólo me gustaría una cosa, que Cristina existiera... y que no fuese rubia.

martes, 1 de julio de 2008

Monólogo de lo Absurdo

Sube telón. Comienzo parte I. Intérprete parado a un lado del escenario vacio, luz tenue ilumina sólo el centro.
-¡Desadaptado, marginal!- me gritó algo desde el cielo, creo yo, al ver la totalidad del esplendor de mi órgano reproductor sexual, ahí, frente a aquella pared blanca, en la cual caía el líquido que mi cuerpo no quiso y que los biólogos llaman orine.

Giré sobre mis talones para responder el grito, alcé la mirada y logré ver una señora asomada por la ventana. -Cochinaaaa.. ¿qué haces tú viendo?- me di cuenta que aún seguía orinando, lo que causó una mancha con forma de arcoiris en la desdichada pared blanca que aceptaba mis improperios.

-Voy a llamar a la policiaaa- volvió a recriminarme.

-¿Y yo tengo la culpa que me den ganas de orinar justo aquí, en la pared de tú casa?. Lo lamento, señora vieja, pero déjeme ejercer mi derecho o voy a ser yo quien llame a las autoridades- contesté, levantando mi dedo índice, como cuando alguien dice algo importante.

Derrepente, sentí un corrientazo, un chorro de agua fría directo a mi ombligo, impactante, que por efectos de la impelable gravedad llegó a la totalidad del esplendor de ya saben quien, causando una acción retractil, parecida quizás, a la de las tortugas cuando se les molesta.

Pronto dejó de ser un chorro... para convertirse en mi propia cascada... y me vi empapado repentinamente, inclusive vi como volaba hacia mi un tobo lleno de agua, con el propósito de mojar cualquier cosa que se atreviese a estar en mi cuerpo.

-Vieja me mojaste- alcancé a gritar, temblando de frío.

-Vete borracho impertinente- respondió.

-¿Que me vaya?. Ahora que me mojas, ¿quieres que me vaya?, si me mojaste es porque querías verme desnudo.- Respondí, atreviéndome a ser sincero con mi contrincante. Y empecé a quitarme la camisa lentamente, cantando para mi la típica canción del striptis o como sea que se escriba, porque cantarla en voz alta hubiese sido una pérdida de tiempo. Me vi despojado de mi pantalón, mis medias siempre de color negro, las que me enseñó mi padre a ponerme, mi interior desteñido de otro color, todo, absolutamente.

-Aquí me tienes, como me lo pediste- grité, con todas mis fuerzas.

-Ya llamé a la policía, borracho...- Fue lo último que escuché de mi querida amiga. Al poco rato me atacó la nostalgia, no pude mantener nisiquiera esta nueva relación con esa señora, que no tuvo la culpa, de que alguien como yo tuviese la valentía de hacerla despertar con mis hazañas. Me senté en el filo de la acera, desnudo, mojado, y llorando, a esperar que mis nuevos amigos viniesen a buscarme.

Y aquí estoy, señor oficial, desnudo, mojado y llorando. Dándome golpes en el pecho por lo cruel que he sido. ¿Cree usted que debo ir a tocarle la puerta para pedirle su misericordia?. O acaso ¿debe ella acercarse hasta mí, y rogarme por nuevas fechorias en la pared de su casa?.

Se oscurece el escenario.
Comienzo parte II, intérprete se cambia de vestuario. Iluminación más intensa. Escenografía: una silla en el centro.

Hice lo que me dio la gana en mi vida de adolescente. No lo puedo negar yo, ni tampoco aquella señora que por una noche se convirtió en mi confidente.

Las consecuencias de la borrachera decidieron salir a la luz pública justo en el momento en que pasaba por aquella casa, y a partir de esa acción me vi encerrado en un calabozo junto a otros desadaptados meones, hasta donde quiero recordar.

Parece ilógico que con el estilo de vida que llevaba me hayan arrestado por orinar; pero ahora que lo pienso en frío, fue la gota que derramó el vaso que contenía mi vida de criminal.

El estar ahí me abrió los ojos. Estar encerrado me permitió ser libre, por muy paradójico que suene. Mi vida se convirtió en una propaganda de esas que venden cosas por televisión, con un antes y un después que estaba por construirse. Llame ya, al teléfono que ve en pantalla si desea cambiar su estilo de vida.

Desde aquel entonces, no volví a pasar por esa parte del pueblo. Hasta que un día decidí cerrar el círculo, para terminar algo que debí haber hecho hace tiempo. Caminé hasta la casa, me llené de valentía para tocarle el timbre y contarle quién era a la señora. Justo en esa ventana, apareció la chica más linda que mis ojos jamás hayan podido ver. Le pregunté si se encontraba la señora de la casa, y en ese momento rompió en llanto, con palabras entrecortadas alcanzó a decirme que su madre había muerto hace tiempo. Quise llorar con ella, pero sólo bajé la cabeza.

Me preguntó quién era yo y cómo había conocido a su madre. Fue entonces cuando decidí mirarla de nuevo, a los ojos, para convertirla en la espectadora principal de mi historia, y quizás, con suerte, en protagonista.

Dicen las malas lenguas, que siempre después de una historia triste, aparece una de amor.

Final parte II. Se oscurece el escenario. Cae el telón.

sábado, 14 de junio de 2008

¡¡¡Primer Aniversario!!! Gracias al Ocio

Gracias al Ocio se viste de gala para anunciarles a todos sus lectores que hoy estamos de fiesta por el ¡PRIMER ANIVERSARIO!

Comenzó todo aquella tarde 19 de junio, una idea, mi sueño. Lo puedo resumir como una piquiña de neuronas a la cual le di vida, después de haber dado vueltas en mi cabeza, apareció una tarde que decidí dejar de reprimirme el deseo de escribir, ser leído y empezar una vez por todas a decir humildemente lo que tengo adentro, desahogarme y sentirme libre. A partir de ese momento histórico, Gracias al Ocio ha sido más que un desahogo para mi, ha llegado a convertirse en mi orgullo, algo mío y sólo mío, una idea que ahora es palpable, dejando de ser un simple sueño, para formar parte de lo que soy como persona.
Decir que soy escritor es burlarse de los escritores, inclusive de los que no han tenido éxito. Para mi, soy un loco atropellado que empezó hace un año escribiendo rápido lo que le saliera del corazón, haciéndole honor un poco a la esencia del blog que es escribir gracias al ocio, a no tener nada que hacer pero sí mucho que decir. Y entonces, creo que a través del paso de los textos y del tiempo he crecido, quizás madurado (no me atrevo a estar seguro de eso), cosa que me trajo dos consecuencias: ahora escribir un texto implica más trabajo de lo que podría haber incluido uno de los viejos (para más información revisar "los archivados") y la otra, más grata, es que el texto me complace mucho más.

El humor (y en gran manera la ironía) fue por un momento la fuente de inspiración que tenía para Gracias al Ocio. Fue entonces cuando me enfrenté contra mi gran pared: no soy un humorista. Por lo tanto, casi el 90% de las veces que me sentaba a escribir me salían puros chistes malos frustrantes. Admito que el humor sigue siendo mi norte para escribir, y vivo constantemente pensando en situaciones graciosas para escribir, y ahí está la causa por la cual mucha gente que me conoce dice que digo puros chistes malos. Además, me sucede algo peculiar porque para mi el humor tiene mucho grado de complejidad, que al escribir hay que agregarle otro paso: después que se te ocurre una idea graciosa hay que hacer un texto completo de eso, y les confieso que ahí es donde se queda la mayoría. Sin embargo han salido unos cuantos buenos, entre los que puedo mencionar en orden de preferencia propia: "Dilema de la NO publicidad" que aún cuando lo leo me da risa, "Pequeño Larousse de las Profesiones", cuya primera idea graciosa fue la profesión del Maitré de arepera (verdaderamente existe). Y mis dos ironías: "Don Tobo" y "El Espanto Nacional".

Otra de las cosas que me dedicado a hablar es de mi vida. Puedo decirles con seguridad que cada personaje nombrado a lo largo de este año tiene un poco de mi, o de alguien importante para mi. Por lo tanto, los lectores que mejor me conocen se habrán dado cuenta cuándo menciono algo mío y cuándo me pongo creativo a inventar. De hecho, casi siempre cuando cuento algo de mi vida, hago la trampa más válida de todas y agrego o quito cosas al hecho, pero que conste que lo hago por la salud de los que leen. Los textos más personales que he escrito son: "La Muerte" y "Crónicas de la Ex" (capaz hay otros... pero esos son los que más recuerdo).

Al momento de crear el blog lo primero que me puso a pensar fue el nombre. Y luego de mucho, pero mucho pensar, surgió la idea de que las frases más locas y desaliñadas salían en los momentos en los que dedicaba mi mente a divagar por el espacio. Es inexplicable la sensación cuando aparece una buena idea: me dan ganas de sonreír y mi mente entra en una eterna plegaria al Ocio (protagonista indudable de mis letras). Es entonces cuando el texto, dependiendo de lo dura y buena que venga la idea, fluye hacia el teclado de mi computadora y ahí nace una nueva historia, un cuento, algo que decir. Sin embargo, no todos los textos han sido así como: se me ocurrió, me senté y escribí. Entre los que más me han costado escribir puedo comentarles de "La Urbe Latina", refiriéndose a mi siempre querida Caracas, en el cual estuve horas tratando de evitar caer en errores de redacción y concordancia, buscando como loco la manera de escribir bonito, para finalmente darle a Caracas el texto que siempre había querido escribirle, logrando así una de mis metas.
De la misma manera que ha habido buenos, ha habido otros pocos dignos. Siento que caí en una depresión al escribir "Objetos Inútiles pero Imprescindibles", cuando 13 días antes había escrito otro horror titulado "Tubazos", notando que había perdido totalmente el rumbo del blog y definitivamente metí la pata al publicar "Cajeros Automáticos" confirmando la teoría del 90% de chistes malos. Esa temporada espero más nunca repetirla y agradezco infinitamente la ayuda de quienes me lo dijeron.
El blog completo es mi más grande satisfacción; pero han habido momentos y cosas que me han hecho sentir orgulloso. Empiezo contándoles cuando escuché por primera vez a una lectora leyendo un cuento mío, aunque parezca muy pequeño, fue grande para mí darme cuenta que lo que ella leía lo había escrito yo. El segundo: haber conquistado lectores difíciles y críticos, de todas las edades y profesiones. El tercero: haber escuchado una grabación con el diálogo de "Modern Mother" y que haya salido al público universitario. Por último, una cuarta: ser reconocido por lo que escribo, gustarle a la gente y que sientan incluso lo mismo que sentí yo al escribir. Además de esto, me complacen muchísimo los comentarios que me han dejado, confieso que me levantan el ánimo en momentos difíciles, así que infinitas gracias a todos aquellos lo han hecho.

Podría contarles durante esta celebración muchas anécdotas sobre los cuentos, pero se me está haciendo largo. Para resumirles un poco, les coloco algunas de ellas y estadísticas:
1) El texto más viejo que he escrito y publicado es "Farmatodo" escrito el 22 de octubre de 2006. Sin embargo, hay uno más viejo que planeo rescribir.
2) Al momento de escribir esto tengo 1720 visitas según el Cuenta visitas de la derecha y 35 textos publicados sin incluir éste. Quiere decir... que tengo 49,14 visitas por texto. Cosa que es una absoluta mentira, porque cada vez que la página se carga, el Cuenta visitas suma 1, y cada vez que hago una modificación en el blog la página se carga. En realidad ¿cuántas visitas tengo?, pues pocas. En cifras REALES llevadas por otro contador más SERIO: he tenido desde el 15 de mayo hasta hoy (al momento de escribir) 50 visitas REALES. Entre ellas el 57% ha entrado directamente, un 24% desde otra página y un 9% desde algún motor de búsqueda. ¿Se impresionaron?, pues les puedo decir que 23 de esos visitantes tienen Internet con CANTV y 13 con Supercable y 5 con Intercable.
3) Si me piden escoger un post favorito, elijo… “El Espanto Nacional”. Por lo mucho que me divertí haciéndolo.
4) Lo que más me ha frustrado con el blog es poder conseguir más lectores. Creo que hubo un momento a lo largo del año en que fui famoso y después la gente no me siguió visitando. La inmensa mayoría de los lectores fieles son contactos del MSN que se meten cuando anuncio un texto nuevo. Del resto: Google me resultó un fiasco total, puesto que, si ponían "Gracias al Ocio" en google ¡sorpresa! salía de primerito... ahorita estoy de 2do en la 2da página. Mal, mal, google, no sabes el error que cometes. Y el grupo en facebook tiene 65 miembros, la gran mayoría gente de mentira creados por mí.
5) He tenido 39 comentarios. Y por ironías de la vida, el post que más ha tenido es uno llamado "No sé cómo titularlo", que escribí justo después de presentar un parcial en la universidad. Mientras presentaba, se me ocurrió escribirlo.
6) Nunca, creo yo, mis padres han leído algo de lo que yo he escrito. A mi hermana si se lo he mostrado, y me la gané como lectora.
Esos han sido los numeritos del blog durante este año. Parece mentira, honestamente nunca pensé que llegaría al año escribiendo. Tengo que confesarles que ha sido muy agradable para mí haber podido entretenerlos por todo un año. Y a partir de este momento entro en la parte sentimental, ya para cerrar, y dar los agradecimientos.
Gracias infinitas: a los que han invitado gente a leer Gracias al Ocio, a los que me han abierto las puertas, a los que siempre están pendientes de lo nuevo publicado, a los que les he hecho preguntas sin sentido, a los que me han animado a continuar, a los que me hacen sentir un Gabriel García Márquez, a las personas que he puesto en mis textos todo este año, a los que me han hecho crecer, a los que me han hecho ver la vida de otra manera, y muy sobretodo A LOS QUE ME HAN PERMITIDO SOÑAR.
En especial, mil gracias, primero que todo a César Velásquez, a quien le debo muchísimas cosas de mi, incluyendo este blog y por haberme enseñado el arte de la literatura. A Seimi Sugawara y a mi Dalia García, por ser mis fan número Uno, siempre apoyándome. A Lorena Cortés (G.E.L.), por estar detrás de mí con la edición de los textos. A todos los "Cookies" especiales por su apoyo, cariño y entusiasmo, de personas como ellos está lleno el cielo. A mi familia entera, en especial a los que tanto extraño. A la UCV, por enseñarme a vencer las sombras. A Dios, por todo.

Felicitaciones GRACIAS AL OCIO... 1 AÑO!!!!

Dedicado en la memoria eterna de Josefina "Tifita" Tirado de Méndez (mi abuela) y Luis "Pajarito" Grüber (mi abuelo), a quienes estuviese enormemente orgulloso de haberles entregado este blog completo.
Hay estrellas en el cielo… que estarían celosas de brillar como ellos lo hicieron

sábado, 17 de mayo de 2008

Flashback

Eran casi la hora de cerrar en el banco, faltaban sólo 4 minutos. César undió su mano en el acelerador de la moto e hizo rugir el motor de la Yamaha. El casco que tenía de respuesto se balanceaba en la parrillera, a punto de volar por los aires. El tráfico era típico de un día de pago, pero no significaba nada contra su experiencia de años sobre el volante de una moto, esquivando carros, transeúntes, postes de luz, y cualquier cosa que se le atravesase en el camino. Entró corriendo, con 3 cheques y sus respectivas planillitas de depósito en una mano, y en la otra llevaba el casco y un chocolate cri-cri para la cajera, comprado en la panadería de la esquina. Existen ciertos favores que se deben retribuir de vez en cuando, y uno que otro chocolate o algún cariñito, era bien recibido por las cajeras.

Había mucha gente en el banco a pesar de la hora. La taquilla de los viejitos estaba full de cincuentones que se hacían pasar por ancianos, pero justo al lado se encontraba la cajera fanática de los chocolates. Le hizo una seña discreta, lo suficiente como para que la viese sólo ella, y la mitad de todos los demás aburridos. Detrás del vidrio le respondieron con otra seña no tan reservada. César se acercó a la caja, donde estaba parado un señor que lo miró desconfiado, quien se hizo violentamente a un lado, como con asco de tocarlo. Le entregó los depósitos a la susodicha, junto con el chocolatico y un hola mi amor. Se quedó al lado del señor, aún asqueado por su presencia. Las manos de la cajera se movieron más rápido que monopatín en bajada y, milagrosamente, se rompió un record entre cajeras. Le dio las gracias con una sonrisa de oreja a oreja. Se alejó del señor que ahora estaba con la boca abierta, y pasó entre la multitud aburrida del banco. Justo después de salir, vio cómo dos chicuelos le sacaban una navaja a un hombre alto con traje.

Flashback.. y empezamos de nuevo.

Era casi la hora de cerrar en el banco, faltaban sólo 4 minutos. Karina se dedicaba a pensar en lo que debió estudiar para su exámen de hoy, mientras atendía mecánicamente a las personas en la cola en el banco. Se estremeció de su mala suerte ya que justo el día de su exámen, era fecha de pago y debía quedarse más tiempo en la taquilla atendiendo al público y quizás con el tráfico no llegaría a tiempo a su clase. Surgió de la cola un señor de aspecto y acento portugués con chaqueta, que todos conocían muy bien en el banco porque religiosamente todos los 15 aparecía para depositar bastante dinero. Justo entonces se dio cuenta que el motorizado de los regalitos estaba parado frente a ella. No pudo contenter los deseos de comer algo dulce en la tarde, así que le avisó con la mano que se acercara y al portugués que se hiciera a un lado. Para compensarlo, puso además ligera atención en sus depósitos. Al terminar, le entregó los recibos de vuelta y el motorizado salió mandado hacia la calle, lamentando no poder ser ella y tener que quedarse ahí sentada atendiendo gente, en un trabajo que parecía ser eterno.

Flashback.

Era casi la hora de cerrar en el banco, faltaban sólo 4 minutos para que el vigilante cerrara la puerta. Según Joao, era la hora perfecta para acercarse, todos los 15 y 30 de cada mes, para depositar el dinero que ganaba en una panadería y una pescadería cercanas al banco. Ese día había llegado adelantado; pero ya había perdido varios minutos importantes en la cola del banco. Saludó a la cajera con indiferencia, miró para ambos lados discretamente y le entregó un paquete de billetes de alta denominacíón, los cuales recibió la cajera con más indiferencia aún, a pesar de que el total era más de lo que podía llegar a ganar en 4 meses. Justo en ese momento apareció por detrás un moreno fornido, con guantes en la mano, agarrando un casco, un chocolate y un manojo de papeles. Fue evidente su reacción de miedo, y se alejó con un brinco. No hacía falta que la cajera le dijera que se apartara de la taquilla. Pensó por un instante en que podía perder todo el dinero que con tanto trabajo había ganado aquel mes. A pesar del susto había sido sólo un prejuicio, y lo acompañó con la mirada mientras se alejaba hacia la puerta del banco. Dejó que la cajera terminara su trabajo, se despidió con un buenas tardes, salió del banco apurado e hizo caso omiso al hombre alto con traje que hablaba y lloriqueaba con dos policías.

Flashback.

El hombre alto de traje era yo. El plan inicial era esperar al portugués antes de que entrara al banco, como siempre lo hacía unos minutos antes de la hora de cierre. Pero ese día el portugués había cambiado el plan y llegó antes de que yo estuviese en mi posición para interceptarlo y robarle el botín del mes. Al llegar, pasó por delante mío, pero me vi desprevenido a muchos metros de distancia. Maldije por lo alto mi mala suerte y no tuve más remedio que pasar la calle para pensar qué hacer en la acera frente al banco. Justo en ese momento aparecieron dos bándalos, armados con navaja, me abordaron rápidamente y me pidieron el celular y la cartera. Sacar la pistola en plena calle implicaría llamar mucho la atención. Y me importaba más seguir al portugués, que lidiar con dos pequeñines del crimen. Decidí dar mi brazo a torcer y les entregué mi cartera. Pero aún no había terminado mi mala suerte. Porque cuando uno no los necesita aparecen, vi que dos policías habían visto el robo y corrían hacia mí. Me temblaron las piernas, no por el robo sino porque llegasen a percatarse del arma oculta en mi saco. No tuve otro remedio que dármelas de víctima, lloriquear un poco frente a ellos, y ver pasar al portugués caminando apurado. Ladrón que roba ladrón, tiene cien años de perdón.

jueves, 1 de mayo de 2008

Vago espinazo de la Noche.



Al principio yo no quería hacerlo pero fui seducido por la idea. El pacto suicida surgió en el orfanato después de que Don Civarinno, el encargado, nos castigó con un baño de agua fría. Nos mantuvo desnudos en el patio, secándonos bajo la mortecina luz de una luna menguante. Estuvimos ahí durante horas, temblando hasta el cansancio y asqueados por el olor que llegaba desde un corral en el que yacía un perro moribundo. Por la desnudez, el frio penetrante, la neblina que le daba un tono melancólico y los ruidos que hacía el animal, nos sentimos más huérfanos que nunca.
Habíamos puesto sal en la azucarera de los maestros, y a todos los castigados nos pareció que la tonta travesura no merecía ese duro castigo. A las cuatro de la mañana entramos al dormitorio, algunos aún destilando gotas de agua, otros sin poder hablar por la boca congelada, y entre gemidos de frío discutimos en cómo vengarnos. Ignacio, de once años y el mayor de todos, nos convenció de que lo mejor era morirnos, quitarnos la vida para que Don Civarinno cargara con la culpa del suicidio de niños, por el resto de sus días.

Ignacio era hijo de un curandero y familia de una esperitista. Se enorgullecía al decirnos que tenía contacto con el más allá y conocimiento sobre los rectos caminos de la muerte. Nos enseñó a invocar a los más extraños espíritus, en lenguas jamás oidas por alguno de nosotros. Y se atrevió a describirnos la existencia del Vago Espinazo de la Noche conformado de polvo de luz y de puras constelaciones. No se nos hizo difícil imaginarnos esa inmensa y luminosa covertura brillando en la negrura del firmamento.

Nos prometió que por ella ascenderíamos a Dios: iniciaríamos ese viaje magistral por el coxis, al final de la espalda, e iríamos trepando por las vértebras donde tendríamos el placer de descubrir los miesterios que cualquiera pudiese imaginar.

Al alcanzar las cervicales podríamos entrar al cerebro de Dios. Eso nos dijo. A todos nos encantó la idea y seguimos las instrucciones de Ignacio. Durante ocho noches, los cinco compañeros tomados de la mano y con los ojos cerrados, rezamos las oraciones indicadas. Al noveno día, hicimos una ceremonia formal, hasta donde pudimos, y acordamos el pacto. Ignacio nos dio a masticar mescalina y nos explicó que era para que se nos abriera el espíritu. Mucho tiempo después entendí que era para alucinar. Después entramos al laboratorio a robar cuatro frascos con éter. Y nos lo tomamos.

A pesar de los vómitos, el efecto fue inmediato. Recuerdo el mareo, el zumbido en mis oídos y la terrible visión: el inmenso espinazo gravitaba en el universo, iluminado por sus propios cuerpos siderales. Ahí estabamos todos escalando las primeras vértebras en el esfuerzo por no caer a causa de auqella viscosidad brillante. De pronto el miedo me paralizó y, mientras mis compañeros trempaban hacia la cabeza en busca de la inteligencia, yo, atraído por una fuerza maligna, fui arrastrado desde el centro del espinazo hacia la cola. No sé por cuantas horas descendí por entre los huesos, sentía que mi boca y mi nariz estaban llenas de algo pegostoso, que me fastidiaba. La armoniosa inteligencia estaba muy lejos de mí ahora, y yo, quedé atrapado en la última vértebra del coxis donde se existen las miserias, la maldad, y el odio. Preso en el terror me encontré entre los residuos del caos sin posibilidad de escapar de él, al intentar volver a subir mi cuerpo perdía fuerzas.

Cuando desperté en la enfermería no sentí ningún alivio. Mis amigos murieron y quiero pensar que llegaron al cerebro de Dios. Han pasado siete años desde que se fueron, y yo he sobrevivido enfrentándome cada día con mi realidad y humillado ante la Muerte que misteriozamente me rechazó. Permanezco en la vida, o al menos eso creo, marginado. Perdí la facultad del habla. Y todos creen, incluso Don Civarinno, que soy un idiota.

A veces veo con asombro cuánto se agobia con sus culpas y cómo vive temeroso de los fantasmas, tal como lo planeamos. Sé que algo le pasa en su conciencia, aunque cuando le preguntan, dice que sólo fue una pendejada de niños.

Nadie se imagina cuánto sufro. Con una mezcla de compasión y repudio me llaman ahora Bobo, y me encargaron la tarea de barrer los patios. Y lo hago de sol a sol, mientras mi espíritu aún continúa centrado en el Espinazo de la Noche. Sé que cuando yo ordene mi propio caos saldré de la cola y vértebra por vértebra subiré, tendré acceso a la zona de luz y, como lo hicieron mis amigos, podré penetrar en el divino cerebro.

En eso pienso mientras barro y eso sueño mientras duermo.

NOTA: Texto original de Adela Fernández Fernández, publicado en El Nacional (Sábado 26/04/08).

A pesar de que el original es siempre mejor, me tomé el atrevimiento de editarlo y cambiarle algunas cositas y ponerle otras mías. Así que el texto antes leído no es el que aparece publicado en el diario. Me gustó mucho la manera como la autora toma partes de la realidad y de la ficción, además que se atreve a jugar con ellas.

jueves, 24 de abril de 2008

Universidad Central de Venezuela


Corrían los tiempos aquellos de 1721 cuando el rey de España Felipe V decretó la creación de una universidad en Caracas. Años más tarde, un señor llamado Simón Bolívar juntó ideas con uno menos conocido, pero no menos ilustre, llamado José María Vargas y formaron lo que hoy se conoce como la Universidad Central de Venezuela.

Si sacamos la cuenta la UCV tiene nada más y nada menos que 287 años de edad. Cifra que se dice rápido, pero hay que verle la cara a casi 300 años de dedicación a la enseñanza superior.

A lo largo de la historia se ha dicho que es la punta de lanza de las instituciones del país, es decir, la tapa del frasco, la merma. Sin embargo, en la actualidad, con esa frase podríamos herir el ego de más de algún lector; así que me remito sólo a decir que, nada más el nombre de UCV, tiene algo que decirnos.

Por sus pupitres han pasado: José Gregorio Hernández, Andrés Bello, Andrés Eloy Blanco, Miguel Otero Silva, Irene Sáez, Raúl Leoni, Arturo Uslar Pietri, entre muchos otros que se han destacado a nivel nacional y fuera de las fronteras, que me tomaría todo el texto nombrarlos. (Y por supuesto.. yo, modestia incluida).

La universidad es más que una casa de estudio, aquellos que hacemos vida día tras día, aquellos que ya han pasado por ahí, saben que la UCV es especial, es un gran mundo en miniatura, en donde conviven diariamentre deportistas, drogadictos, filósofos, vagos, malandros, ricos, sifrinas, poetas, músicos, pelabolas, escritores, cantantes y hasta donde nuestra imaginación llegue; de hecho, lo interesante es que todos los días veo algo distinto. Ser ucevista es más que estudiar ahí, es un sentimiento, es algo que llevamos con nosotros para donde vayamos, una marca registrada, algo que nos diferencia de todos los demás estudiantes. Soy Ucevista y mi nombre es tal... dicen los egresados, Soy Ucevista y trabajo en.. , Soy Ucevista y estudio en...

La Ciudad Universitaria muchas veces se convierte en nuestra casa. Nuestros compañeros en nuestra familia. Si queremos comer vamos al Comedor, después nos provoca echar una siesta vamos a Plaza Cubierta, queremos estudiar entramos a la Biblioteca Central, hablar paja y otras cosas más, ahí está Tierra de Nadie, para un concierto el Aula Magna, unas birras: la parroquia.

El valor agregado de la UCV es que no sólo nos prepara como arquitectos, abogados, contadores o ingenieros, sino que ahí tenemos la oportunidad de aprender a ser ciudadanos, a desarrollarnos en lo que más nos guste, a crecer, a aprender a ser humano, ser fieles a los ideales, a luchar por lo que se quiere, a tenderle la mano a quien lo necesita, en fin, a ser personas.

En sus espacios se aprenden materias que no entran en ningún pensum del mundo. Claro está, que no todo aquel que estudia ahí es una monedita de oro, pues la universidad no hace al estudiante y durante esos 5 años hay gente que pasa por la UCV.. y la UCV no pasa por ellos.

Digan lo que digan de la universidad, con los mil problemas que tiene, desde el 2000 es Patrimonio Mundial y Cultural de la Humanidad decretado por la UNESCO(ver aquí). Lo que nos hace sentir orgullosos de convivir en un espacio tan importante para Venezuela, nuestro Alma Máter.

Como dice el Himno... la UCV ha sido, es y será siempre..


LA CASA QUE VENCE LAS SOMBRAS!.


U.. U.. U C V!